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    Para los deportes

    Ionizador de agua / Para los deportes

    Agua alcalina ionizada: "dopaje natural"

    La ingesta adecuada de agua es uno de los factores más importantes para el buen rendimiento y el bienestar en el deporte. Durante el deporte perdemos mucho más líquido y sales minerales que con una actividad física baja, por lo que es esencial reponer la deficiencia de líquidos en el organismo. No sólo es importante la cantidad de agua elegida, sino también sus propiedades. El agua alcalina ionizada está especialmente indicada para deportistas por sus propiedades únicas, que adquiere mediante electrólisis.

    Antioxidante natural para una mayor resistencia

    El agua alcalina ionizada es un antioxidante natural. Los antioxidantes son esenciales para el organismo en el deporte, así como en cualquier otra actividad, porque refuerzan el sistema inmunitario general, inhiben el daño celular del ADN y activan los procesos vitales del organismo. Esto es importante en el deporte porque permite soportar mayores cargas y, por tanto, rendir mejor. Los altos niveles de esfuerzo físico, el agotamiento físico y emocional, el exceso de trabajo y el sobreesfuerzo provocan estrés oxidativo (en otras palabras, un deterioro más rápido del organismo). Los científicos han demostrado que los antioxidantes, sobre todo las vitaminas C, E y el selenio, ayudan de forma natural a combatir estos problemas. Los antioxidantes también estimulan la producción de enzimas, que son esenciales para el control del peso, la digestión, la absorción de alimentos, el mantenimiento de los niveles hormonales y son importantes para la belleza: uñas, cabello y piel sanos. Así, las propiedades antioxidantes del agua alcalina ionizada reducen el estrés oxidativo causado por el ejercicio intenso, aumentan la resistencia y permiten entrenamientos más intensos.

    Neutralización de los ácidos formados

    El agua alcalina ionizada tiene un pH más alto que el agua normal, lo que reduce la probabilidad de acumulación de ácido láctico en los músculos durante el ejercicio. Mientras que el ejercicio de baja intensidad no produce ácido láctico, durante el ejercicio de alta intensidad, cuando las células empiezan a carecer de oxígeno, se produce ácido láctico en los músculos. Esto suele provocar dolor después del ejercicio. Dado que los álcalis destruyen los ácidos, beber abundante agua alcalina ionizada reduce el dolor porque la sangre se repone con sustancias alcalinas adicionales, que se devolverán a los músculos.

    La estructura molecular del agua alcalina ionizada es muy importante. Los derivados moleculares más pequeños que el agua normal diluyen la sangre. Como la sangre es más fluida, transporta el oxígeno más fácilmente a donde se necesita. Con más oxígeno, hay menos posibilidades de que se forme ácido láctico (que se produce cuando las células empiezan a carecer de oxígeno). Sin oxígeno, se producen fenómenos anaeróbicos que dificultan el trabajo, cansancio y dolor muscular. Además, el agua alcalina ionizada es más gravosa debido a su menor peso molecular, por lo que se absorbe más rápidamente, facilita la "alimentación" de las células sedientas y disuelve y limpia las toxinas y grasas de nuestro organismo, ayudando así a controlar el peso.

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